lunes, 13 de septiembre de 2010

Papel Prensa: las dos caras


Papel Prensa S.A. es una empresa argentina dedicada a la producción de papel de diario. Fue fundada en 1972, y su planta, inaugurada el 27 de septiembre de 1978, está ubicada en la localidad bonaerense de San Pedro. Es operada por un directorio elegido por la asamblea de accionistas. El Grupo Clarín posee el 49 % de las acciones y el resto se reparte entre el diario La Nación y el Estado argentino.

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner presento un proyecto de ley sobre Papel Prensa que esta enmarcado en la investigación judicial por la apropiación de las acciones de dicha papelera por parte de Clarín y La Nación.

En la noche del 27 de agosto de 2010 el actual Gobierno envió a la Cámara de Diputados el proyecto de ley sobre Papel Prensa. En su primer artículo declara de interés público la producción, comercialización y distribución del insumo básico para los diarios: la nueva legislación deberá garantizar el abastecimiento de papel a todas las empresas que lo requieran, en igualdad de condiciones; también se deberá garantizar la materia prima nacional durante todo el proceso de fabricación del papel. En los fundamentos, el Poder Ejecutivo argumenta que el proyecto surge a partir de que “los accionistas privados de Papel Prensa (Clarín y La Nación) producen para su propio abastecimiento y no para la sostenida demanda del mercado interno”. Además, el Gobierno denuncia un sobre costo del 40 por ciento en las ventas para los pequeños diarios del interior del país.

En 1969, la dictadura militar encabezada por Juan Carlos Onganía creó el Fondo para el Desarrollo de la Producción de Papel y Celulosa, por medio del decreto ley 18.312, para crear la primera empresa nacional de papel de diario.

En 1972, el presidente de facto Gral. Alejandro Agustín Lanusse asignó el proyecto a César Augusto Civita, César Doretti, Luis Alberto Rey y Editorial Abril S.A, que pasaron a controlar la compañía, a pesar de que la licitación quedó desierta porque ninguno de los proyectos cumplía el 100% de los requisitos del pliego. De acuerdo al contrato entre el Estado y Papel Prensa, el Estado asumiría una participación minoritaria y se retiraría del proyecto a los 10 años de la puesta en marcha, lo que nunca ocurrió.

Al poco tiempo, el ministro José Ber Gelbard (del gobierno peronista) forzó la venta de Papel Prensa al banquero David Graiver (quien tenía vinculaciones con Gelbard), y la empresa pasó a ser controlada casi en su totalidad por Rey y por Rafael Ianover, quien era testaferro del banquero. Rey inmediatamente le vende a Galerías da Vinci S.A. (sociedad del Grupo Graiver), compra que nunca fue aprobada por la Asamblea de Papel Prensa (lo que era un requisito estatutario). Graiver, que además tenía fuertes vinculaciones con grupos militares por haber sido subsecretario de Lanusse, quedó así en control de la compañía. Años después, a Graiver se lo relacionó con la organización Montoneros, de la que habría recibido dinero para administrarlo o invertirlo.[] [

Al fallecer Graiver en 1976, su viuda y su hermano vendieron sus acciones. El 2 de noviembre de 1976, se firmó el traspaso de las acciones de Graiver en Papel Prensa -cuya planta estaba en construcción- a los diarios Clarín, La Nación y La Razón.

Seis meses después, los miembros del grupo Graiver fueron ilegalmente detenidos y sus bienes intervenidos; además, el pago por la venta de las acciones no fue cobrado por ellos sino que se lo incautó el Estado.

Luego de la detención de los Graiver, el ex almirante Massera, integrante de la Junta Militar que gobernaba de facto, buscaba intervenir la compañía argumentando que los diarios eran una "pantalla" de los Graiver, y que los Graiver (y en consecuencia la Organización Montoneros) seguían vinculados a la empresa. Massera controlaba en área de prensa de la dictadura, y quería controlar el abastecimiento de papel para influir a los diarios.

Debido a la polémica por la vinculación Graiver - Montoneros y la compra hecha al Grupo Graiver, Clarín, La Nación y La Razón afirmaron en el artículo "A la opinión pública" publicado en los tres diarios, que la compra de la compañía "se celebró a la luz pública y con el consentimiento previo y posterior del Estado". La nota, aparte de despejar las acusaciones de la relación Graiver - Montoneros y que estaban asociados a los Graiver, se resguardaba el abastecimiento de papel para todos los diarios

En septiembre de 1978, en plena dictadura argentina, un grupo de empresarios, entre los que se encontraba la propietaria del grupo Clarín, Ernestina Herrera de Noble, y del diario La Nación, Bartolomé Luis Mitre, inauguraron la planta de Papel Prensa.

En el 2000, el diario La Razón se declaró en quiebra y sus acciones que tenía en Papel Prensa, fueron compradas por el Grupo Clarín y por La Nación. Años después La Nación vendió una parte de sus acciones a Clarín.

Hacia marzo de 2010 el debate acerca de lo que había sucedido con Papel Prensa se agudizó y fue el detonante que hizo surgir el ya nombrado proyecto de ley: por parte del gobierno se acusó a los diarios de haber comprado la empresa cuando la familia Graiver estaba detenida, con abuso de esta situación; pero por parte de los diarios se señala que el Gobierno tergiversa la historia para tomar Papel Prensa y controlar el acceso de los diarios a un insumo que consideran "vital". Atribuyen la intención a un plan para dominar los medios y argumentan que los Graiver fueron detenidos en marzo y abril de 1977, en tanto que habían vendido las acciones el 2 de noviembre de 1976. Remarcan que en ninguna de las oportunidades en las que los Graiver declararon, luego de restaurada la democracia, en distintas causas judiciales vinculadas con su detención ilegal, hicieron mención o referencia a haber estado secuestrados o amenazados al momento en que vendieron las acciones de Papel Prensa.

En tal sentido, el mismo 24 de marzo de 2010, el columnista de La Nación Joaquín Morales Solá, escribió en ese diario que el gobierno nacional quiere devaluar la empresa para comprarla más barata y, así, dominar a los medios de mayor tirada. Pero el ex canciller Rafael Bielsa respondió en el diario Buenos Aires Económico que la operación se concretó el 18 de enero de 1977 a un valor –según diversos investigadores– varias veces menor al real.

El 4 de abril el periodista Adrián Ventura, denunció al presente gobierno en el matutino La Nación atribuyéndole la intencionalidad “de apropiarse de la empresa” Papel Prensa: "La cronología de los hechos es contundente, y prueba que las acusaciones que se efectúan desde el kirchnerismo son falsas y que sólo tienen como finalidad generar un clima favorable para que el Gobierno se apropie de la empresa, de manera de controlar un insumo vital para los diarios y presionarlos.


Alumnas: Echevarria Guillermina, Ramacciotti Paula.

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